A veces un 5 vale mucho más que un 9

Se han endurecido los requisitos para optar a una beca. Hay quien se queja y hay quien lo justifica.
Siempre se ha dicho que todas las opiniones son válidas, pero yo a estos segundos no les entiendo.

Dicen que las becas han de ser para aquellos que demuestren merecerlas. Disimuladamente (o no) quieren hacernos entender que no se puede "regalar" estudios a quien no los merece.
Se supone que quien no merece estudios es aquel que no obtiene notas excelentes...

Pero, ¿de verdad hay todavía quien cree que un 5 y un 9 reflejan realmente el potencial de un estudiante?
Porque no habrá baremo menos fiable que este tipo de calificaciones.

Se supone que el 5 lo merece quien trabaja lo justo y el 9 el que se aproxima a la excelencia. Sin embargo, un 5 no siempre es igual, del mismo modo que tampoco lo es el 9.

Un estudiante que está agobiado por la situación doméstica (un progenitor en paro que ya no cobra prestación, el otro cobrando el salario mínimo, facturas por pagar, una posible hipoteca sobre sus cabezas, hermanos menores en edad escolar que necesitan libros de texto...) no rendirá "tan satisfactoriamente" como uno que no lo esté.

Es muy fácil obtener buenas notas cuando solo hay que preocuparse por estudiar. En cambio, sentirse una carga por el coste de los estudios, no ayuda a obtener buenas calificaciones.

¿Quién es más válido, aquel que obtiene un 6 a pesar de su mala situación personal o aquel que obtiene un 8 porque, afortunadamente para él, su máxima preocupación es escoger las asignaturas del curso siguiente?
Yo lo tengo claro.

¿Cuántas grandes mentes quedarán en la cuneta por recortar en becas?

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